Celebraciones del mes de noviembre


Un cuarto de siglo al servicio de Dios: el padre Rafael Viloria celebra sus bodas de plata sacerdotales

El pasado 28 de noviembre, la comunidad Eudista en Venezuela, se vistió de fiesta para celebrar los 25 años de ministerio del padre Rafael Gregorio Viloria Márquez, quien se ha destacado por su labor pastoral, social y formativa en la Congregación de Jesús y María. Más de 250 personas, entre familiares, amigos, feligreses y autoridades eclesiásticas, se dieron cita en los espacios del CEFOR, donde se realizó una solemne eucaristía acompañada por el cardenal Baltazar Enrique Porras Cardozo, arzobispo de Caracas, y presidida por el padre Rafael Viloria.

En el presbiterio, acompañaron al homenajeado 20 sacerdotes, mostrando la alegría de poder recordar como el servicio en el ministerio sacerdotal, es fuente de alegría y plenitud entre los hermanos sacerdotes, durante la homilía, el padre Viloria, recordó cómo es don de Dios su ministerio, asimismo destacó su compromiso con la formación y evangelización, carisma propio de la Congregación de Jesús y María.

El padre Viloria nació en Valera el 7 de agosto de 1970, hijo de María Auxiliadora Márquez y Rafael Viloria. Es el quinto de seis hermanos. Recibió la ordenación sacerdotal el 28 de noviembre de 1998 en la parroquia Jesús Obrero de Valera, y en esta celebración eucarística fue conmovedor su renovación de las promesas sacerdotales que realizó en el pueblo cristiano ante Dios hace 25 años.

Al finalizar la celebración eucarística, el padre Viloria recibió algunas palabras de afecto de los presbíteros, También recibió diversas muestras de afecto y reconocimiento por parte de los asistentes y personas con las que ha compartido su ministerio. La fiesta continuó con un compartir fraterno en la terraza del CEFOR donde se disfrutó de música, y un brindis por el padre Viloria.

30 años formando y evangelizando en Temblador.

BREVE RESEÑA HISTÓRICA

PARROQUIA “SAN JOSÉ Y SAN JUAN EUDES DE TEMBLADOR”

Temblador es un centro poblado del sur-este del estado Monagas, en Venezuela, capital del municipio Libertador. Se localiza a 50 mts de altitud en las planicies del delta del río Orinoco. Se comunica con el resto del país por la carretera que une Maturín con Barrancas del Orinoco. Su localización, en las inmediaciones de la faja petrolífera del Orinoco, ha generado un proceso de instalación de industrias vinculadas a las labores de exploración y explotación de petróleo, lo que ha reactivado una economía tradicional basada en la ganadería, vacuna y caballar, y en los cultivos de maíz, leguminosas y yuca. Sus orígenes se vinculan a la explotación petrolera de la zona que tuvo lugar a partir de 1930, desarrollándose una infraestructura urbana organizada siguiendo el tipo de campamento petrolero, posteriormente abandonado.

A nivel “religioso”, por décadas el pueblo de Temblador y sus adyacencias, estuvo atendido espiritualmente por la Parroquia San Rafael Arcángel de Barrancas del Orinoco la cual tenía que velar por la atención pastoral de todo el sur del estado Monagas. El sacerdote administrador de velar por esta atención pastoral – espiritual se le reconoce hoy día su audacia misionera y sobre todo su ímpetu incansable de haber podido lograr alcanzar en medio de las controversias y peripecias de la vida una atención favorable a las necesidades espirituales de la época. Pasa los años, y esto se fue haciendo cada vez más difícil recorrer, debido al crecimiento poblacional del momento y del Boom petrolero que emergía en el tiempo.  

El discernimiento, y la preocupación de la Iglesia “Madre y Maestra” se hacen sentir debido a lo anteriormente preocupante. Mons. Antonio José Ramírez Salaberría (1958 – 1994) Primer Obispo titular de la recién creada diócesis de Maturín, luego de una gran trayectoria de visitas pastorales en todo el Estado y haber experimentado la fatiga en años que se convirtieron en décadas,  ve la necesidad de seguir restructurando la pastoral diocesana para así responder a los grandes desafíos misioneros que se venían dando por medio de la orientaciones nuevas que venían surgiendo de las Conferencias generales del Episcopado Latinoamericano. Fue así, como realizó los estudios necesarios en la zona y haber logrado el sí contundente del Consejo Presbiteral del momento decide crear una nueva parroquia la cual será su Patrono San José en el pueblo de Temblador. Podríamos decir, que según datos históricos desde el año 1953 esta comunidad tenía ya claridad espiritual de quien sería su patrono. San José, el patrón de la Iglesia Universal ahora será oficialmente el que protegerá la feligresía de Temblador. Además; por datos históricos, estuvo vinculada hasta el año 1994 con el antiguo distrito Sotillo de Monagas, pero el 27 de septiembre del mismo año logra alcanzar oficialmente su autonomía. Desde ahora pasará Temblador a pertenecer al Municipio Libertador.

Un centenar de sacerdotes, y laicos consagrados han experimentado el “Ser misioneros”  en estas tierras del Sur del estado. Destacamos la labor pastoral importante del P. Humberto Gómez cjm, proveniente de la Ciudad de Colombia, el P. Balbo Bianchini cjm, de nuestra querida Provincia de Canadá.  Desgastaron parte de la vida ministerial evangelizando en medio de las precariedades del momento. También jóvenes seminaristas, (hoy ya sacerdotes eudistas: P. Fernando, David, José Toribio, José Luis, José Antonio); formandos religiosos, asociados eudistas, catequistas y servidores recuerdan el pasado con gratitud debido a que la Palabra de Dios se ha sembrado y el fruto ha sido provechoso regalándonos a la Iglesia diocesana y congregacional sacerdotes dignos de ser Pastores según el Corazón de Dios. Hoy elevamos una oración a  Dios por todos aquellos hombres que en medio de la Misión se dejaron cautivar por la Voz del Maestro y dijeron sí con generosidad al seguimiento de Jesús.   

En relación al dato religioso que hoy queremos resaltar, haciendo memoria histórica de estos 30 años como Parroquia Eclesiástica, fue en la mañana del 15 de noviembre de 1993 (30 años) cuando se llenó de júbilo y regocijo la población de Temblador porque ya sus sueños estaban haciendo realidad. Toda la feligresía católica se dirigió al Templo parroquial y participó activamente del programa religioso que se había elaborado muy minuciosamente por  hombres y mujeres de la comunidad que compartían sus ideales. Una nueva Parroquia Eclesiástica nacería en la diócesis de Maturín. Ahora Temblador tendría una comunidad de  sacerdotes viviendo en la Parroquia.

Cuenta la historia y la teología narrativa de quienes hoy se encuentran con nosotros que fueron días llenos de gozo y alegría, semanas preparando el gran aconteciendo de la visita de MONS.  ANTONIO JOSÉ RAMÍREZ, del Padre Provincial PEDRO NICOLÁS BERMÚDEZ VILLAMIZAR CJM, miembros del Clero diocesano, específicamente EL P. HERNALDO MARTINEZ, sacerdotes eudistas P. MANUEL CARDONA CJM, P. BALBO BIANCHINI CJM y el P. ACACIO MORENO, invitados especiales de la comunidad. Todas las comisiones de trabajo, los movimientos apostólicos existentes, REPRESENTANTES DE LA GOBERNACIÓN, LA ALCALDÍA Y EL CONSEJO MUNICIPAL, se hicieron sentir, debido;  a que agradecían a Dios las bondades recibidas y sobre todo a la Virgen del Valle por el milagro dado. Señalamos que estas instituciones gubernamentales y específicamente la ALCALDIA tenían algo en particular, participaban de la fe activa de la Iglesia Católica y reconocían públicamente el trabajo pastoral evangelizador de los PADRES EUDISTAS que se venía realizando desde años en las zonas adyacentes de la nueva comunidad parroquial, específicamente en Tabasca, Uracoa, el Fangal, Boca de Uracoa, las Alhuacas, entre otras que limitan con Puerto Ordaz, el Delta Amacuro y Bolívar.

La emoción y los aplausos se desbordan cuando por labios de Mons. Antonio José Ramírez se dio comienzo al acto de instalación y al proclamar al P. MANUEL CARDONA CJM como nuevo párroco responsable de la comunidad, entrega oficialmente las llaves del Templo. De esta manera, comienza toda una ceremonia llena de luz, de alegría y de gozo espiritual.

Una nueva comunidad Eudista se implantaba en las tierras del sur del estado Monagas respondiendo así, a los grandes desafíos del espíritu misionero de las constituciones.

 “Testigos de un Reino de justicia y de libertad, los Eudistas, prestando oídos a los más pobres, aceptan ser la voz de los que no tienen voz. En armonía con las directivas de los obispos se comprometen a promover entre los hombres una repartición más justa y fraternal de los bienes de este mundo. Son conscientes de que el Evangelio tiene el poder de realizar la liberación integral del hombre” (N°25).

Hoy a 30 años de este grato acontecimiento queremos agradecer la memoria histórica de nuestro querido pueblo de TEMBLADOR e invitarles a seguir siendo parte integrante de esta misión apostólica. Aún hay mucho que realizar.

Oramos por nuestros sacerdotes Eudistas que a lo largo de estos 30 años han entregado su vida al Servicio del Pueblo de Dios. Los honramos con una oración sencilla y humilde para que todo esfuerzo que realizaron  para llevar esta obra encomendada, sea de provecho para su santificación.

Al Padre Manuel Cardona cjm (1993-1994), al P. Williams Colmenares cjm (1994 -2004) a quien se le debe el mérito por medio de su entrega perseverante y constante a que hoy San Juan Eudes sea el Co-patrono de la comunidad parroquial, al P. José Toribio La Cruz cjm (2004-2008), al P. Rafael G. Viloria Cjm (2008-2012), al P. Fernando Duartes cjm (2012-2017), al P. Alejo Fernández cjm (2017-2022). Hoy al P. Jormín Fermín cjm, (2022 – ) quien sigue con la Misión provincial de seguir instaurando el anhelado Reino de Dios.

Destacamos que en cada ciclo de trabajo pastoral, a lo largo de este recorrido histórico, se ha hecho el esfuerzo a nivel Provincial de hacer de esta obra parroquial una comunidad local donde hermanos incorporados, candidatos y asociados  manifiesten a los fieles  lo que nos invita las constituciones eudistas: “A fin de vivir como hermanos, los Eudistas ponen en común el fruto de sus trabajos, en espíritu de desprendimiento y de mutua participación. Entregan íntegramente a la comunidad los estipendios de sus actividades y no reclaman jamás la menor parte de ellos como bien personal. La comunidad proporciona a cada uno, con gran caridad, todo lo que es necesario y conveniente. En lo concerniente al vestido y a la sencillez de vida, los Eudistas están sometidos a las obligaciones comunes de los clérigos” (N°47) “Saben, en efecto, que en la unidad y en el mutuo amor de sus discípulos se revela Jesucristo. Y porque quieren anunciar plenamente a Jesús Salvador se esmeran humildemente por amarse los unos a los otros” (N°51).

Aún, quedan muchas cosas que decir, muchos datos precisos que recoger; muchos nombres que resaltar en esta noble Misión. Sus nombres están escritos hoy en el corazón de Dios y oramos porque fueron un instrumento de gracia y de salvación para estos pueblos. Tantos misioneros que agradecer. ¡Dios les recompense!

Viva Jesús y María.

P. RAFAEL G: VILORIA cjm

SUPERIOR PROVINCIAL

*Extrapolación realizada con datos recogidos de miembros de la comunidad parroquial. 


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